Quién nos iba a decir que lo vintage estaría tanto de moda.
No sé muy bien por qué pero lo cierto es que cada vez son más los que se
enamoran de esta tendencia, de las prendas de segunda mano y del aroma de lo
antiguo. Realmente, es entendible. El vintage nos enseña ese amor por los
objetos con historia y a recordar con cariño el pasado. Un pasado del que
decimos que fue mejor, aunque la mayoría de nosotros ni siquiera lo conocimos.
Sin embargo, nos gusta pensar cuando compramos un objeto de segunda mano en su
anterior o anteriores dueños. Quiénes serían, qué sentirían, cómo sería su vida,
qué les pasó, qué significó este disco, este libro o estos vaqueros para él o
para ella.
Los vintagefílicos somos
unos bohemios. Nos gusta estar enamorados. Somos unos adictos a la oxitocina
(famosa hormona que se libera en el cerebro en la etapa de enamoramiento).
Queremos adrenalina en nuestro cerebro y esto también nos lo produce el entrar
en una tienda vintage. Te puedes enamorar y te puedes enamorar de lo vintage,
pero ¿qué te parece la idea de enamorarte mientras descubres el Madrid más
vintage? Uno de los mejores planes que se me ocurren para una cita con tu
pareja es hacer una ruta vintage por el Madrid más romántico. ¿Preparado para
liberar toda la oxitocina que puedas? A continuación te propongo 6 ideas
vintage de lo más románticas para una cita especial.
Una buena cita romántica ha de durar un día entero. Solo charlando
muchas horas podéis llegaros a conocer profundamente. Y si no un día entero,
como mínimo una tarde, pero tiene que ser una tarde muy completa. Podéis
empezar tomando un café, cappuccino preferiblemente, en una cafetería con ese
toque bohemio para hablar de todo lo que os apetezca: música, literatura,
filosofía, cine, objetivos, política, movimiento hippie, amor… (nunca de
Sálvame, no querrás que salga corriendo). Una de las cafeterías de estilo retro
más imprescindibles de Madrid es Lolina Vintage Café. Sus muebles y papel
pitado de los años 60 y 70 conseguirán que te enamores.
El amor nos hace idiotas. No puedes enamorarte sin ser un
completo imbécil. Solo así descubrirás que hacer el tonto con esa persona
especial es una de las mejores cosas que existen. Por eso, mi idea es que os
vayáis juntos de compras. Lo sé, ¿de compras? Es lo último que tienen que hacer
las parejas. Pero yo hablo de compras divertidas. Entrar en una tienda de moda
retro tras otra y probaros las prendas más antiguas y que jamás os pondríais
consiguiendo parecer una pareja sacada de los años 60. Os aseguro que jugar es
muy divertido y, por suerte para los dos, en Madrid no tendréis ningún problema
en encontrar una tienda de moda vintage. Aunque yo me quedo con El Templo de
Susu en Malasaña.
Momento intimista y romántico (mi parte preferida de la
cita). La siguiente parada en nuestra ruta romántica vintage por Madrid es una
vieja tienda de discos. ¿Hay algo más vintage que un vinilo de segunda mano?
Las horas se pasarán volando hablando de música, navegando entre ejemplares de
The Cure, The Beatles o The Smiths, escuchando una canción romántica tras otra
y discutiendo sobre qué disco fue mejor que otro. Me enamoro solo de pensarlo.
Para ello lo mejor es que vayáis a una de esas tiendas de discos de toda la
vida, de las que se especializan en la compra y venta de discos de vinilo de segunda mano.
Una vez puestos en el mundo musical, irse a la literatura es
lo más natural. Pasar de una tienda de discos a una librería de segunda mano
suena como poco apetecible. Si sois empalagosos podéis leer poesía o si, de lo
contrario, os va más romper estereotipos siempre podéis coger a Bukowski o leer
algún tramo de Lolita, así caldeamos el ambiente. De todas maneras, si eres una
amante de los libros y del retro, te será imposible no enamorarte del olor tan
característico de una primera edición. Un auténtico tesoro de papel y tinta.
Tanto pensar os ha dado hambre, pero no podemos salirnos de
nuestra ruta vintage, por eso os propongo cenar en una mesa junto a una de las
maravillosas y clásicas ventanas de Maricastaña, el restaurante perfecto en Malasaña
con aire retro. Os lo advierto, si ya no os enamoráis en un ambiente así no
tenéis nada que hacer juntos.
Laia Barreda @laibarreda